Innegablemente, una de las sagas más importantes de la animación japonesa en nuestro territorio es Dragon Ball. A lo largo de los años hemos recibido juegos de la franquicia, ya sean de peleas o de aventura. Pero un juego se había mantenido en la exclusividad de los arcades de Japón, eso al menos hasta principios de este mes, ya que Bandai Namco trajo a nosotros Super Dragon Ball Heroes: World Mission para los más acérrimos fanáticos.
Mi idea en este espacio es comentarles los aspectos más importantes del juego como también lo negativo, para que al final veamos si este juego es digno de que vayas a gastar tu dinero a tu tienda más cercana, aunque siempre al final pueden haber matices.
Bueno, comencemos:
Como expliqué al principio, Super Dragon Ball Heroes: World Mission es un juego que se escapa de lo que habíamos recibido últimamente, ya que es un juego de cartas donde ponemos a pelear a nuestros guerreros más poderosos dentro del canon de Dragon Ball, como lo no canon y spin off. Lo cual en este momento no quiero imaginar, ya que la cantidad de personajes es absurda.
La parte visual del juego es algo que ya nos había mostrado Yu-Gi-OH, donde las cartas que usamos toman forma física y pelean entre sí, esta es una explicación más por fuera ya que el combate en si tiene sus momentos emocionantes y mecánicas.
Entrando directamente a ese ámbito, tendremos que elegir 7 cartas de las cuales podremos elegir tres tipos: Héroes, Elite y Berserker. La diferencia entre los tres tipos radica en su distribución de energía y el daño que pueden llegar a provocar, por supuesto que los que generan menos daño no quedan inutilizables tan rápido como los que generan más, en el caso especifico de los Berserker. Los tres tipos también tienen habilidades que pueden generar efectos sobre nuestros propios aliados y los enemigos.
El campo de juego se divide en dos, tenemos un panel de espera y uno de ataque, en el cual podemos poner nuestras cartas dada la situación. Algunas cartas si están en la zona de espera, pueden apoyar a la zona de ataque. Además, debemos ser precavidos con el momento en el cual ponemos ciertas cartas al ataque, algunas veces es mejor esperar un par de turnos para poner a los berserker, ya que como expliqué anteriormente se «cansan» más rápido.
Lo más importante en las batallas, es tratar de acumular Puntos de Energía de Héroe, con ello podemos hacer ataques especiales que se añaden al daño, acelerando nuestra victoria. Y además podremos ocupar items para ganar diversas bonificaciones o perjudicar al oponente. Está demás decir que el oponente tiene las mismas posibilidades que nosotros, así que hay que ser cuidadoso.
En cuanto a la historia, y debido a la naturaleza de este juego, yo creo que está claro que nos vamos a dar una vuelta por todo el «Toriyama-verso» y mucho más. En la partida comenzarás como un héroe que tiene un «don especial» y está hecho para jugar este juego, este será reclutado por el «Gran Saiyaman 3» para enfrentar diversas anomalías generadas por un enemigo desconocido en el mundo del juego, lo que está provocando una contraposición con el mundo real, una amenaza a gran escala.
En el modo historia, iremos avanzando por etapas y derrotando a nuestros enemigos, también hay otras de dialogo para avanzar en la historia, y otras de premios.
Si vamos al menú, este tiene opciones de tienda con objetos que se pueden comprar (obvio) y una sección de gacha, donde podremos conseguir cartas raras o normales.
También tiene el correspondiente modo en linea, en el cual nos enfrentamos a otros usuarios y su set de cartas, además del modo historia y arcade, entre otros.
Si tuviera que nombrar puntos buenos del juego, estos serían sus sistema de batalla y la música, los enfrentamientos son bastante entretenidos, variados y estratégicos. En cuanto a la música, es buena para el tipo de juego que es, me recuerda mucho a los temas felices de Dragon Ball Super, y puedes comprar temas del anime para ponerlos en el juego y disfrutarla aún más.
Bueno, y como todo no es bueno, vamos a los puntos bajos del juego:
Después de las horas que jugué, yo creo que lo peor del juego es la parte visual en las batallas. Los personajes que salen de las cartas a pelear, son sin chistar, casi sacados de algún juego de PS2, remasterizado.
El juego cuenta con voces en las batallas, pero se siente que son sacadas de la maquina de arcade con grabadora, si no me entienden acá, las voces se escuchan en mis audífonos como si estuviera parado en el mismo arcade jugando, apenas se distingue lo que dicen.
Un punto bajo del juego, aunque a mí personalmente no me molestó tanto porque supieron adaptarlo, son los momentos climax en la batalla. En algunos momentos tenemos que mover las direccionales para cargar un ataque, colocar una carta con ellas para activar un ataque, formar letras con las cartas. Suena algo realizable en un juego de consola o pc, pero el detalle es que la interfaz es la del arcade. Creo que debe ser muy divertido hacerlo en la maquina, pero con mi control no tanto.
En fin, para resumir un poco la cosa, este juego es bueno, tiene mecánicas divertidas y tiene una rejugabilidad absurdamente amplia. El único problema es que tienes que ser fan de Dragon Ball para poder disfrutar este juego al 100%. Aunque si no lo eres, igual puedes darle una oportunidad, ya que como juego de cartas, en mi opinión, cumple.