Normalmente Microsoft se había destacado por hacer muchos eventos en nuestro país, con temporadas más movidas que otras. De lo que nos ha tocado vivir acá en Gamercafe hemos visto durante este 2016 una suerte de «revival» de Microsoft en Chile, celebrando muchos lanzamientos para Xbox One de la manera como se hacía en los años dorados de Xbox 360 en nuestro país y que lamentablemente pasó hace unos años por un momento de hermético silencio.
La semana pasada Microsoft decidió cerrar el pintoresco 2016 con un evento de «fin de año» muchísimo más relajado que el resto, donde más bien se invitó a una suerte de actividad social de relajo que otra cosa, sin embargo se aprovechó la oportunidad para hablar de lo que es actualmente Xbox One S en nuestro país. Durante la breve charla, se comentó que Microsoft en Chile hizo un tremendo esfuerzo para poder sacar la plataforma Xbox One S con soporte y precio oficial pegado al lanzamiento mundial, algo que se concretó y se destacó.
Sin embargo el verdadero plato de fondo del evento fue la demostración de Dead Rising 4 donde la primera impresión fue darse cuenta rápidamente que el título está intentando recuperar el «humor» que tuvo en algún momento la franquicia, y que a pesar que sigue en manos de desarrollo occidental por Capcom Vancouver de alguna manera la sensación fue mucho más «familiar» y «back to roots» frente a lo que, a título personal, viví con Dead Rising 3. Obviamente esto fue una prueba que no duró muchos minutos, una pequeña pincelada, por lo que no da para «análisis» profundo en esta oportunidad, pero al menos fue lo suficientemente contundente para ver de regreso al veterano Frank West (ahora de 52 años en la historia) en acción.
Agradecemos nuevamente a Microsoft por la instancia y la invitación, que volvemos a destacar fue de un carácter más «light» y expedito que de costumbre, pero que cierra el 2016 con las esperanzas de ver a Microsoft todavía muy activo en nuestro país el 2017, esperanzas que hace un par de años atrás estaban más o menos perdidas.