La 5ª expansión de World of Warcraft, Warlords of Draenor, lleva ya más de una semana desde su lanzamiento. Gracias a los cabros de Blizzard, pudimos probarla y compartir con uds. lo que ha sido esta experiencia.

WoD (Warlords of Draenor) poní­a muchas cosas en juego, ya que en Mist of Pandaria, su expansión anterior, la cantidad de suscriptores iba cayendo más y más. Al parecer el equipo de desarrollo del juego sabí­a que se jugaban la vida, por ende esta expansión tení­a que traer de vuelta a la gente que se habí­a ido del juego. Y cumplieron.

Desde el momento en loguear a WoW, tomar la quest para ir al Dark Portal y enfrentar a los nuevos enemigos: The Iron Horde, uno se da cuenta de lo que depara esta nueva expansión: Guerra. Al ir avanzando a través de las primeras quest, nos van mostrando quienes son los lí­deres de la Iron Horde, en la cabeza con el enemigo principal: Gromm Hellscream. Pero no estamos solos, ya que a nuestro lado tenemos al Mago Khargad, Vindicator Maarad (el Draenei de la cinemática de The Burning Crusade) y una nueva compañera draenei, Yrel (quien tiene suma importancia en la historia del juego).

Por historia, WoD no se queda corto, pero tampoco es lo único que ofrece el juego. WoW se actualiza a estándares actuales, rehaciendo los modelos de nuestros antiguos personajes (cambio que se necesitaba hace demasiado), donde se saca provecho en expresiones faciales, y por sobre todo, en las nuevas cinemáticas in-game. Hablando del aspecto gráfico, también se nota que las nuevas zonas de Draenor están muy bien hechas, en donde los detalles dan ese valor plus en esta región. í‰sto, más la hermosa banda sonora de esta expansión, hace que estemos inmersos en la zona en donde estamos haciendo misiones, o concentrados durante el evento principal que estemos realizando.

Tenemos también algo nuevo para hacer, en nuestro Garrison. Acá estaremos a cargo de una pequeña ciudad (la cual es nuestra), donde podremos crear edificios, los cuales darán distintas habilidades para la misma ciudadela o pequeñas ayudas mientras questiamos; followers que iremos reclutando mientras avanzamos en la historia, quienes harán misiones, dando recompensas y subiendo ellos mismos de nivel, entre otros.

Blizzard también se tomó a libertad de hacer pequeños cambios en la lista de misiones, donde ya es más fácil ubicarlas; las bolsas de nuestro inventario podemos organizarlas a nuestro antojo (¡y de forma automática!), la nueva Toy Box, donde están todos nuestros items de entretención (al fin no ocupan espacio en el banco), rastreo de monturas y pets para saber cual nos falta y como sacarlas, y muchos pequeños detalles que hasta no conocerlos, no sabí­amos que los necesitábamos.

World of Warcraft: Warlords of Draenor, era la revitalización que necesitaba WoW para volver a llamar la atención a los viejos jugadores, como también a la gente que se quiera unir en este MMORPG. Si algunas vez jugaste WoW, y te gusto, vuelve a Draenor y no te arrepentirás.