Estuvimos en el lanzamiento del evento que se denomina como la muestra de videojuegos más grande del mundo

Sí­, probablemente al igual que tú varios nos quedamos pensando qué demonios estaba pasando en Costanera Center cuando a solo un dí­a de su estreno llegó el comunicado de prensa oficial a varias webs de videojuegos nacionales confirmando Game On, un evento traí­do directo desde el Barbican Centre de Londres a Shilito con la intención de mostrar lo que ellos proclaman como «la exhibición de videojuegos más grande del mundo«… así­ de directos, nada de tonteras, hasta el 30 de Abril.

Era más que obvio que acá fuimos corriendo a ver qué sucedí­a y acá tienen para ustedes esta revisión de lo que consiste esta muestra que fuera que ser al estilo de museo nos encontramos con lo que podrí­amos calificar como Freeplay (y lo de «free» es un decir) de una extensa galerí­a de juegos Arcade, consolas y ordenadores de todas las épocas, con ejemplos realmente hermosos y otros no tanto que nos hizo buscar entre los que visitamos la inauguración la respuesta a lo que todos se han estado preguntando desde principios de esta semana: ¿Vale la pena pagar hasta incluso 15.000 pesos por ir?.

Dentro del marco de lo que es un anuncio tan grande y de una envergadura tan masiva como deberí­a ser un evento de esta naturaleza el puntapié inicial acá es comentar sobre la publicidad: El dí­a Martes nos llegó el comunicado de prensa anunciando Game On y nosotros (y varias webs amigas) quedamos totalmente confundidos. A solamente un dí­a de su inauguración no sabí­amos qué era Game On, de dónde provení­a, cuánto iba a durar y ni siquiera cuánto iba a costar. Lo más impresionante de la situación es que al menos hasta el dí­a mismo de la inauguración la web oficial del evento estaba arriba con un hermoso «Pronto» que fue actualizado posterior a todos los anuncios. La única forma que encontramos para hacer una «investigación» (si se le puede llamar así­ a poner un par de letras en Google) fue encontrar la entrada de Wikipedia y la preventa en Puntoticket donde nos enteramos del trasfondo de su existencia.

Según lo que pudimos escarbar Game On es una exhibición que nació el año 2002 en la Barbican Art Gallery de Londres y que su objetivo principal es mostrar al mundo una galerí­a de tí­tulos que la gente del museo mencionado considera «fundamentales en la evolución de los videojuegos«, pasando desde los inicios mismos durante los sesenta hasta las últimas consolas a la venta, agarrando el mundo de los Arcade, los computadores y el mundo consolero, así­ también como una que otra cosa exótica. Todo lo expuesto viene con la intención de rescatar esta «cultura pop» (aunque a algunos les moleste esa palabra) comandado por el señor Conrad Bodman, el comisario artí­stico encargado de la idea en Barbican.

Según las palabras de Bodman, la intención más importante del evento es mostrar el rescate de todo el hardware que ha pasado por esta importante industria y que no sea olvidado por «el público general«, algo que varios sabemos que es bastante complicado y que es agradable que los museos empiecen a preocuparse del tema de la conservación y restauración de hardware arcaico a primera vista, al menos para los que consideramos a los videojuegos un arte tan válido como la música y el cine.

Bajo toda esta introducción histórica quiero volver a poner en la mesa el tema de la publicidad: Con la importancia que el evento dice tener (que va mucho más allá de la entretención, sino del valor de «galerí­a de museo») realmente nos cuesta creer la poca publicidad que tení­a hasta ahora. La única instancia que escuchamos del evento fue gracias al diario La Tercera el Domingo pasado y en una nota de 24 Horas la noche del dí­a anterior al comunicado oficial. Probablemente faltó mayor movimiento en redes sociales o algo así­, pero creo que es más o menos unánime que el evento se está gestando casi de boca en boca, al menos que seas un cliente habitual de Costanera Center. En fin, al menos ya te enteraste.

El Miércoles 27 de Marzo a las 8 PM llegamos a la inauguración oficial de Game On y la primera impresión fue conocer lo que es la recién inaugurada galerí­a del «Nivel 5» del Costanera Center precisamente con este evento. El lugar es el clásico espacio de Mall pero dedicado exclusivamente a eventos de estas caracterí­sticas, con más de 1.600 metros cuadrados que hizo que todo estuviera muy esparcido y que no sufriéramos ningún tipo de congestión dentro del recinto, en ese aspecto el espacio está de sobra.

Describir la manera en cómo está organizado Game On no es realmente fácil y acá es donde empieza una crí­tica que le ha caí­do fuerte: Se supone que Game On está organizado a nivel «histórico» y «cronológico», sin embargo realmente se nos hizo muy difí­cil compartir con esa descripción porque si bien al entrar es cierto que lo primero que nos encontramos fue con una máquina de Pong y unas máquinas apagadas de Computer Space ya después el tema empieza a desmoronarse, con la sección Arcade (que estamos claros que está metido bajo el alero de lo «viejo», sin expositores post-2000) bien organizada pero que después se mezcla con la consolera donde hay un desorden cronológico importante en cómo están mostradas, así­ también unos módulos bastante confusos (destaco de manera personal uno donde habí­a un Nintendo 64 donde en la pantalla se estaba mostrando Mario Kart Double Dash y que no era intuitivo darse cuenta que la Gamecube estaba más o menos oculta).

La sección Arcade del evento, que es la primera en llamarte la atención fuera de la sección prehistórica, es probablemente el mayor fuerte a nivel «tal vez no vea esto a corto plazo o probablemente nunca más» con máquinas originales y cabinas completas de Donkey Kong, Missile Command, Asteroids, Xevious, Puck Man (sí­, Puck y no Pac, LA original) tanto vertical como versión cocktail, Frogger, Elevator Action, Dig Dug, una hermosa Neo Geo MVS de 6 slots y otras más, incluso algunas que ya son noventeras en todo sentido como Virtua Fighter que me emocionó volver a verla después de tantos siglos. La parte Arcade de seguro que es una de las más completas a la hora de sentir que el pago de una entrada vale la pena (no quiero imaginarme cuánto pagaron por traer las máquinas y encontrarse con los amigos de la aduana… welcome to Chile!) sin embargo algunas palancas no estaban del todo bien cuidadas… algunos dirán que eso le da la experiencia Arcade local fielmente, heh.

En la sección de consolas y computadores personales prácticamente hay de todo: Desde plataformas de los setenta pasando por las empresas que todos conocemos como Atari, Sega o Nintendo. Ahora, algo que nos pareció bastante curioso para mí­ y otras personas de otras webs de videojuegos es que casi todo el hardware que habí­a occidental es PAL, en otras palabras si no te has topado nunca con consolas o ordenadores Europeos te va a llamar la atención ver juegos como Super Mario Kart corriendo a 50 hercios (y créanme, SE NOTA, jugar SMK en 50cc en PAL es una experiencia de aquellas… para sentir condolencias por los hermanos de Pulpo Frito). Afortunadamente habí­an también plataformas Japonesas como el Famicom conectado con su Famicom Disk System, una PlayStation Net Yaroze y una MSX original de allá, aunque la verdadera parte «Japonesa» se la guardaron para más adelante.

Fuera de eso los juegos que estaban disponibles son clásicos indiscutidos como Mario Bros, Bubble Bobble, Dragon Quest, The Secret of Monkey Island, BurgerTime, Lemmings, Sokoban, Pilotwings, Sim City, Prince of Persia, Donkey Kong Country 3: Dixie Kong’s Double Trouble!, Puyo Puyo Fever, Star Soldier, Tetris, Ridge Racer, Final Fantasy VII, GoldenEye 007, The Legend of Zelda: Ocarina of Time e inclusive algunas cosas simpáticas como Fighting Street, la versión del primer tí­tulo de Street Fighter para el CD-ROM de PC-Engine/Turbografx. Probablemente lo más raro y agradable al mismo tiempo fue ver entre medio a Garou: Mark of the Wolves para MVS en la sección de consolas muy a pesar que no era de AES, supongo que se ahorraron una cabina. Algo interesante pero para algunos tal vez no muy atrayente visualmente es que estaban disponibles varios ordenadores con sus sistemas operativos o utilidades funcionando libremente, por si alguien quiera lucir sus conocimientos en público de algunas variables para Basic o CP/M.

Como Game On viene directo de Europa no solamente fue llamativo ver los sistemas PAL, sino también varios ordenadores clásicos de esos lados que acá eran muy difí­ciles de pillar, lo que para algunos puede ser un interesante puente a conocer el mundo de la Amiga y software desarrollado en el paí­s que produce el evento.

Dando la vuelta a la derecha nos encontramos con un extraño lugar dirigido a lo que serí­a, al parecer, juegos 100% Japoneses. De esta galerí­a habí­an cosas muy llamativas como un Super Famicom corriendo Sailor Moon Super S: Kondowa Puzzle de Oshiokiyo (el juego de puzzle de la famosa serie de animé) aunque el que se llevó el premio al «OMFGYES!!11» fue ver un Densha de Go 3 con la palanca original para el tren en su versión de PlayStation 2. Aleatorio y al mismo tiempo agradable fue ver entre la pila de juegos Japoneses a Warning Forever, el juego Indie de Hikoza T. Ohkubo del 2003 que de verdad no me lo esperaba para nada. Como extra a pesar que el juego es mega popular fuera de Japón estaba presente el querido por la mayorí­a Katamari Damacy, bien.

Otro punto que me hizo sacar una sonrisa y sentirme contento por tener un sector exclusivo fue una muestra de Gamecenter CX, el a estas alturas legendario programa de televisión de Fuji TV conocido en su localización como Retro Game Master donde además de tener un proyector mostrando los capí­tulos en gran tamaño tení­an una vitrina con toda la colección de DVDs y los juegos de Nintendo DS… ¡Arino realmente se lo merece!. Finalmente, raro pero entretenido fue ver a Gran Turismo 4 corriendo en una suerte de cabina Arcade que al parecer es exclusiva de la muestra fuera de Inglaterra, todo pegado al sector de GCCX, lo que me hizo volver a recordar el desorden de algunas elecciones. Cabe destacar que entre medio de ésto habí­a una mesa dirigida exclusiva a Spore, el conocido juego de Will Wright (creador de la franquicia Sims que, por cierto, habí­a un computador corriendo The Sims muy alejado de todo junto con Rez al lado… yep, ni idea la relación) donde podí­as observar arte conceptual y figuras muy agradables que dejará contento a todo seguidor de este tí­tulo.

Mientras más seguí­amos avanzando más juegos veí­amos disponibles para jugar en formato Freeplay, lo cierto es que ya para adelante no tení­a ningún orden aunque nos encontramos con gracias muy interesantes como Super Mario World al lado de dos cuadros con firmas originales del mismí­simo Shigeru Miyamoto, unas paredes con imágenes de revistas occidentales y Japonesas, arte conceptual de juegos como Dragon’s Lair y posters de pelí­culas basadas en videojuegos donde lejos lo más chistoso fue ver un poster grande de la pelí­cula con actores reales de Super Mario Bros. y que es imposible olvidarse de ella… por motivos buenos y malos.

Entrando al último pasillo de Game On (probablemente el más ancho) nos encontramos con una sección absolutamente dedicada a Pokémon donde estaba en vitrina un montón de merchandising y juegos originales de la franquicia, tanto Norteamericanos como Japoneses. Para jugar estaba disponible una cabina con una de las versiones de Pokémon de Game Boy (no pude revisar con exactitud cuál era), Pokémon Emerald, Hey You! Pikachu y Pokémon XD: Gale of Darkness. Probablemente para el fan más acérrimo de Pokémon sea una buena excusa para ir pero para los más hardcore no van a llorar de emoción por lo disponible… excepto por una sola galerí­a en especial y probablemente uno de los puntos más fuertes (de manera personal) del evento: Dentro de unos marcos se podí­an ver versiones originales (créemos) de nada menos que la revista Game Freak con los dibujos originales de Ken Sugimori en su era Doujinshi y que para muchos fans de la compañí­a son uno de los objetos más codiciados por coleccionistas de todo lo que haya realizado Satoshi Tajiri, el creador de Pokémon. Supondré que el fan más loco de Pokémon se podrí­a sentir pagado por eso.

Pegado a la sección de Pokémon habí­a una sección dedicada exclusivamente a las portátiles y es literalmente una mesa redonda llena de ellas. Probablemente para los seguidores serios del mundo portátil no vaya a ser algo muy increí­ble la colección que estaba en vitrina sin embargo es imposible no destacar el Game Boy Light versión de Osamu Tezuka Work Shop que es una edición extremadamente limitada y que su versión con Ribon no Kishi puede llegar a costar usada y sin caja más de 400.000 pesos, más allá de eso no hay mucho que decir. Curiosamente y por motivos que siguen saliendo de cualquier orden muy cerca estaba una Sega Saturn con Saturn Bomberman con los diez controles conectados, una experiencia increí­ble que si no la has vivido no dudes en probarlo ya que Saturn Bomberman es recordado como una de las mejores versiones de la franquicia.

Ya al final del evento estaba la sección de juegos «actuales» (llámesele post-2000) y no hay mucho que decir aquí­ sinceramente: Empezando con una Gamecube con Super Smash Bros. Melee, pasando por PlayStation 2 con Jak and Daxter, Xbox con Halo, Wii con Mario and Sonic at the Olympic Games, Xbox 360 con Halo 3, una Xbox 360 con Kinect y afortunadamente Child of Eden y Wii U con Nintendo Land, entre otras elecciones y plataformas. Como era de esperarse a nivel comercial ya casi pegado a la salida del evento nos encontramos con la sección de juegos de ritmo con Rock Band, Guitar Hero y Rock Band: The Beatles, nada que no hayas jugado nunca en tu casa o de muestra en un mall, pero como siempre es agradable que estén ahí­ para el público en que el evento está dirigido.

Game On tiene más de lo mencionado y para no arruinar la sorpresa no vamos a comentar más de lo que está disponible, sin embargo a nivel de primera impresión creo que te proporcionamos una buena idea. Ahora y para finalizar obviamente te estarás preguntando los dos detalles más importantes y conclusivos para querer ir: ¿Vale la pena Game On como evento y realmente valen las lucas que cuestan?. Debido a la poca información que hay la única referencia de precios es la mencionada Puntoticket y la preventa tiene cifras que oscilan entre los 3.300 hasta los 15.400 pesos. «Supuestamente» (y lo dejo entre comillas) las diferencias de precio van dependiendo del dí­a que vayas, la hora y el rato que te quieras quedar, lo que da en evidencia que el mejor momento es ir al evento un dí­a de semana antes de la hora de almuerzo… y es por eso mismo que acá viene la incertidumbre sobre si uno es el público objetivo o no. El buen gR.- me invitó cordialmente a un Podcast sobre el evento en su nueva web Colemono y también grabó una nota sobre Game On en video. Quiero destacar este detalle porque nuestro amigo Afrokid comentó en extenso sus opiniones (que las pueden ver exactamente acá) y dejó en claro su total descontento frente a Game On, en especial por una separación entre lo que busca el público casual y el llamado «hardcore» así­ también como sus errores en el tema histórico y en lo que uno debe calificar como «muestra de museo».

Si bien comparto plenamente lo que dice Afrokid y es algo totalmente cierto, lo real es también pensar que Game On está dirigido para el público que el propio Conrad Bodman menciona: El que se olvida de la importancia histórica de los videojuegos como un arte y un entretenimiento masivo que importa más allá del simple pasatiempo. Game On es un referente para la gente que le llama la atención los videojuegos a nivel promedio, probablemente tiene una consola o computador de última generación y no ha visto un NES en más de 15 años. Como dato misceláneo personalmente me topé con algunas personas literalmente gritando de la emoción por ver un Super Nintendo con Super Mario Kart, como si realmente se tratara de algo que jamás vas a volver a ver en tu vida. Bajo esa prisma social, pienso que en un total de lo entregado y lo que quiere entregar Game On es un evento que sí­ vale pagar los 3.300 pesos, o tal vez inclusive los 5.500 en fin de semana, pero NO más allá de eso. Probablemente la gente que le gusta muchos los videojuegos lo que más va a disfrutar es el panorama Arcade y las plataformas imposibles de ubicar acá sin ser coleccionista de los que compran en el extranjero, pero para la gente que supera el lí­mite del videojugador promedio tal vez pueda llegar a sentirse un poco decepcionado. Vuelvo a destacar que si eres de esas personas que por leer que Game On era el evento más grande del mundo en estas caracterí­sticas pensaste que te ibas a encontrar con Polybius y una Pioneer LaserActive jugando Time Gal en LD-ROM autografiada por Yuji Naka la decepción va a estar ahí­.

Hablando especí­ficamente del lado negativo del evento, es obvio que lo que más destaca es tener muchas discrepancias con lo que el staff de Game On califica como «juegos importantes»: Probablemente el mayor guatazo para muchos de los que estuvimos como prensa fue la falta de Super Mario Bros. 3 o que se haya privilegiado a Street Fighter IV sin ninguna pista de Street Fighter II. También hay unas decisiones realmente cuestionables, como tener a Goldeneye 007 con solamente un control o que aprovechando que el evento viene de Inglaterra no destacaran casi nada del software de allá en ordenadores, los fans de Sega de seguro les va a doler el alma ver que está disponible Sonic The Hedgehog… corriendo en una Gamecube, la por decir lo menos extraña decisión de elegir a Donkey Kong Country 3 en vez del primero, la elección de tí­tulos en la sección dedicada al software Japonés DEFINITIVAMENTE no le hace justicia a la industria mencionada o que Dragon’s Lair, un juego que tení­a prácticamente una sección dedicada esté corriendo en la versión de Wii y NO la original de Laserdisc. Lamentablemente por el «hype» que nos proporcionaron de manera interna me llevé una buena decepción porque no encontramos a Steel Battalion en ninguna parte. El orden cronológico está muy desordenado y hay decisiones que no son muy entendibles, como que esté disponible la máquina Arcade de Star Wars fuera del sector Arcade y entre medio de la parte de portátiles. La localización del evento también tiene detalles curiosos a nivel visual, como por ejemplo que muchos juegos tuvieran un cartel explicando de qué se tratan pero que fueran escritos de maneras tan curiosas, como una descripción con fondo naranjo y letras amarillas, algo que hací­a muy difí­cil leer a ratos considerando que el evento no tiene luz natural y se utiliza un estilo de callejón oscuro con luces tenues en todos los pasillos. Lo más terrible que se sabe del evento y que nosotros no pudimos vivir en carne propia es que ya para el evento masivo el fin de semana habrán colas controladas donde la gente «no deberí­a» poder jugar más de cinco minutos, para que no colapse el evento. Este tema es muy delicado y te lo dejamos a tu conocimiento, ya que es solamente un supuesto.

Como defensa de los puntos negativos, se supone que a lo que fuimos fue una suerte de «marcha blanca», incluso se comentó que habrí­a gente explicando de qué se trataban los juegos uno por uno y, tal vez, existan cambios en los tí­tulos a mostrar durante los dí­as, pero eso ya serí­a especular.

Concluyendo, Game On es un evento que se agradece por traerlo a Chile y que al fin se esté abriendo la mente a mostrar videojuegos fuera de una simple campaña publicitaria y fuera del marco hecho por fanáticos, sin embargo quiero volver a insistir que el evento está tirado a un público que viene a «conocer» y que probablemente no se va a llevar toda la información de manera cronológica si no tienen a alguien explicando y que la gente que está metida hace décadas y vení­a a ver si se encontraba con locuras para observar impresionados una sola vez en la vida se sienta arrepentida de entrar. El precio más alto que tiene la entrada lo encontramos casi un robo y lo decimos sin pelos en la lengua, ni siquiera nos queremos imaginar el total de lo que es venir el Sábado en la tarde desde regiones, sin embargo para los que saben a qué tipo de gente está dirigido un evento realizado en el Costanera Center no le deberí­a sorprender. Vaya, páselo bien, pero vaya TEMPRANO y ojalá si está demasiado emocionado con la idea y trabaja/estudia se tome un dí­a libre. No olvide sacarse su foto correspondiente con la Jaguar gritando DO THE MATH!!!11 a la cámara, lo demás ya está advertido. Doy como detalle final que, aunque algunos piensen que estoy exagerando, un evento de estas mismas caracterí­sticas con una cantidad similar o incluso superior en ciertas ramas se puede realizar de manera local uniendo a la mayorí­a de las webs especializadas del paí­s, aunque bueno, son pocos los que quieren ver su edición ultra limitada de su juego favorito siendo destruido sin querer por un niño de 8 años disfrazado de Yoshi. Quién sabe, tal vez algún dí­a. Pueden ver una galerí­a más completa del evento en nuestro Facebook.